También conocidas como pelotas de semillas, albóndigas de semillas o trufas de semillas, son un concentrado de tierra, arcilla y semillas. Estas semillas pueden ser de todo tipo: de huerta o de especies nativas para reforestar zonas degradadas. Su armado es una actividad que nos permite conectarnos de manera directa con elementos de la naturaleza y generar nuestra propia “pelota de naturaleza” para llevar donde queramos.

¿Cómo se arma?

Mezclamos tierra, un poco de arcilla, semillas y agua. Amasamos, y ¡listo! Si queremos que germinen, las regamos un poquito todos los días y las plantas comenzarán a brotar. Si queremos guardarlas para sembrarlas en otro momento, dejamos que la pelota se seque y la guardamos. Cuando comenzamos a regarla, se activa.

* Si son bombas de semillas de plantas nativas, podemos ir en equipo a lanzarlas en un espacio que queramos reforestar.

* Si son bombas de semilla de huerta, podemos llevarlas a casa y ponerlas en una pequeña maceta y regarlas con difusor todos los días un poquito.

¿Qué hago cuando las plantitas crecen?

Si las tengo en casa, cuando las plantitas crecen, puedo separarlas y ponerlas a cada una en una maceta diferente, para que tengan más espacio para crecer.